“ENTERRAR A LOS MUERTOS Y DAR BUEN CONSEJO”
Enterrar a los muertos es muy parecido, mas yo les digo: los que están en pecado mortal son esos muertos, que viviendo están por fuera blanqueados y por dentro en podredumbre.
A esos primero con oración, con sacrificios y con ayuno lograrán su conversión. En ocasiones están tan endurecidos sus corazones, que ya no ven, ni oyen, ni sienten, por esto son muertos en vida. Tienen en su corazón los 7 pecados capitales. Sólo con la gracia de los que pidan en oración o hablen con ellos desterrarán esos pecados.
Recuerden que para Mí nada es imposible, sólo deseo su arrepentimiento sincero, y su rencor, su odio y todo lo demás se irá quitando, a algunos rápido, a otros con el tiempo.
María sea vuestra ayuda en este acto de misericordia. Yo les bendigo.
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Dar buen consejo. Esto cualquiera, según, lo puede hacer, mas Yo les digo: si esa alma que da el consejo no da ejemplo de lo que aconseja, de nada servirá. Es necesario que al acercarse al alma que pide un consejo, primero se vea la conducta del mismo y así, con esa certeza y seguridad, podrá guiar a esa alma al camino de la verdad, que Yo soy.
Cuántas almas necesitan ahorita de esos consejos, de ese ejemplo para seguir. Sean ustedes ese camino y su corazón sea semejante al mío.
María los ayude en este acto de misericordia. Yo les bendigo.
2:30 PM, 8 de Julio, 2002
Sagrado Corazón de Jesús
Siervos del Divino Amor
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