“Perseverancia.“
Este retiro se tratará sobre la perseverancia recuerdan amados míos, que son muchos los llamados y pocos los escogidos, y no es que algunos sean aceptados y otros rechazados sino que por sí solos serán los que decidan seguir este camino que Yo les he enseñado o seguir el que ustedes crean que es más fácil de seguir.
Saben que el que desee seguirme tendrá que cargar su cruz mas no a la fuerza, sino por amor y ese amor es estar convencidos de amor hacia cada uno sin distinción, estar convencidos de Mi Amor es estar unidos a Mí en todo momento, en los momentos tristes, en los momentos de alegría sentirme presente y tan íntimamente unido a cada uno y desear, con todo aquello que les acontezca, darme gloria.
Perseverancia es fácil decirlo, mas sin Mí jamás la lograrán, porque el que desea recorrer este camino, antes que nada es desprenderse del yo que les estorbará para dar el primer paso. Y el que se esfuerce en desaparecerse, en vaciar todo aquello que les estorbe, ese podrá seguir adelante. Yo los conozco a cada uno y les he dicho, y esto lo deben tener en cuenta, para que en los primeros pasos de esta perseverancia no os vayan a asustar las pruebas de fe que tendrán que pasar no sea que al primero o segundo paso se vayan para atrás.
La perseverancia cuesta por que es la constancia, el sostén de lo que han prometido algunos y que de sentir el peso del camino se sientan a mitad del camino, ni para delante ni para atrás, y allí donde se quedan piensan que ya han ganado la victoria.
La perseverancia queridos hijitos es aceptar Mi Voluntad, con gozo, aún en medio del dolor, del peligro, de lo amargo de lo que no os agrada; mas bien saben que Yo no soy injusto y que a nadie pido lo que no podrá darme.
Perseverancia la tienen en todo aquello que es pecar, que es gozar las cosas del mundo, de criticar, de ofenderse, de estar lo mas cómodos, que nada les falte, para obtener aquello a lo que os llama la atención, asistir a lo que más os agrada y eso hijitos oigan bien, todo eso os estorbará para esta perseverancia que Yo os pido.
Porque lo que Yo les doy es la fe, el deseo de perfección de esa unión de amor que es todo lo contrario a lo que el mundo os ofrece.
Que María sea ese faro que os ilumine y fortalezca. La Eucaristía al recibirme y la oración con fe y devoción les ayudará para esta perseverancia de llegar al encuentro, que Yo los estoy esperando a cada uno con los brazos abiertos para estrecharlos y decirles: “Venid benditos de Mi Padre, porque habéis amado mi Voluntad”.
1998 Septiembre 17, 11:50 AM.
Sagrado Corazón de Jesús
Siervos del Divino Amor